Espectáculos | Autor: Redacción | 09-03-2020
Murió el actor Max Von Sydow
A los 90 años
El legendario actor sueco Max Von Sydow falleció este domingo a la edad de 90 años, según publica la revista Paris Match.
Leyenda del cine europeo, el versátil y prolífico intérprete sueco fue protagonista de obras tan emblemáticas como El séptimo sello o El manantial de la doncella todas ellas dirigidas por su compatriota Ingmar Bergman, del que fue actor fetiche.
Su mujer, la cineasta francesa Catherine von Sydow, con la que llevaba casado desde 1997, ha sido quien ha confirmado “con gran tristeza” la muerte del actor, padre de cuatro hijos. Von Sydow, que vivía en Francia, adoptó la nacionalidad francesa en 2002.
Von Sydow estuvo dos veces nominado al Oscar. En 1989 como protagonista por Pelle, el conquistador, de Bille August, por el que obtuvo el premio del cine europeo al mejor actor, y en 2012 como secundario por Tan fuerte, tan cerca, de Stephen Daldry. También fue candidato al Globo de Oro por sus papeles en Hawaii y El exorcista y a los Emmy por una corta aparición en Juego de Tronos.
Nacido en el seno de una familia aristocrática - su padre era profesor de universidad y su madre maestra de escuela- el pequeño y tímido Max se habituó a hablar inglés y alemán en el colegio católico de Lund y sintió muy pronto su inclinación por el teatro. El actor se formó sobre las tablas y comenzó su andadura en el cine con pequeños papeles en cintas de Alf Sjöberg como La señorita Julia, basada en la obra de Strindberg y ganadora de la Palma de Oro en 1952. En 1955 conoció a Ingmar Bergman, que se convertiría en su mentor.
Su primer trabajo juntos sería en una representación teatral en Malmo del primer montaje en Europa de la obra La gata sobre el tejado de zinc, de Tennessee Williams y a partir de 1957 empezaron a colaborar juntos en la gran pantalla con Ahí viene el señor Sleeman, el inicio de una relación laboral que siguió en otras once películas, muchas de ellas clave en la historia del cine. “Le debo tanto: fue una experiencia extraordinaria y única trabajar con él, porque fue una gran inspiración a muchos niveles”, dijo sobre Bergman cuando acudió en 2012 a la Berlinale.
Su figura de caballero jugando al ajedrez con la muerte en El séptimo sello, o el anciano que recuerda su juventud en Fresas salvajes, son imágenes icónicas del séptimo arte. Otras colaboraciones con Bergman son En el umbral de la vida (1958), Rabies (1958), El rostro (1958), El manantial de la doncella (1960), Como en un espejo (1961), Los comulgantes (1963), La hora del lobo (1968), La vergüenza o La carcoma (1971).
Durante la década de los 60 le empezaron a sonar jugosas ofertas desde Hollywood, aunque rechazó participar en Dr. No , la primera entrega de la saga James Bond. Al final, el impacto de las cintas de Bergman le guiaron directamente hasta la meca del cine, donde encarnó nada menos que a Jesús de Nazaret en La historia más grande jamás contada, la ambiciosa superproducción de George Stevens que le convertirían en un actor cotizado en los Estados Unidos. Por ello, no tuvo más remedio que trasladarse a Los Ángeles con su familia, pero él siempre alternó su presencia tanto en producciones americanas como suecas o del resto de Europa.
Uno de sus papeles más conocidos por el público fue sin duda el del padre Merrin de El exorcista (1973), de William Friedkin, que le otorgó una gran fama mundial y repetiría el personaje de esta historia de terror con Linda Blair en el papel de niña poseída en la secuela El exorcista 2: El hereje (1977), esta vez con John Boorman en la dirección. Le pudimos ver en otras películas de corte más comercial como Flash Gordon, donde encarnó al despiadado Ming y al villano Blofeld en Nunca digas nunca jamás, de James Bond. John Huston, George Roy Hill, Woody Allen (Hannah y sus hermanas), Steven Spielberg (Minority report), Ridley Scott (Robin Hood) o Martin Scorsese (Shutter island) fueron otros renombrados cineastas con los que colaboró.
Alto y desgarbado, de físico inquietante y dueño de unos intensos ojos azules, Von Sydow inició su carrera cinematográfica a comienzos de los años 50 y nunca dejó de trabajar hasta alcanzar sobrepasar las 150 producciones. Miembro de la familia de Star Wars en El despertar de la fuerza (2015), su última película estrenada fue Kursk, en 2018, pero todavía tenía pendiente de estreno Echoes of the Past.
Entre los premios artísticos y distinciones que cosechó en su carrera, Von Sydow fue distinguido con el premio Donostia en 2006 por su trayectoria profesional y fue nombrado Caballero de la Legión de Honor en 2012.
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