EDITORIAL | Autor: redacción | 01-05-2017
40 años después
SÃmbolo y decadencia
Las Madres de Plaza de Mayo conmemoraron 40 años de lucha con actos y espectáculos musicales. Nora Cortiñas, titular de la asociación solicitó la apertura de archivos de la dictadura; Hebe de Bonafini reivindicó al kirchnerismo. O sea, cuarenta años después la razón y la mugre se mezclaron en una olla y, visto lo visto, parece imposible separar los derechos y la verdad, de la inmundicia y la corrupción, que rebaja a ese grupo de noble mujeres, o a una parte de ellas, a delincuentes comunes que se quedaron con los "sueños compartidos" de la gente. Es lógico que Hebe reivindique a su socio de delito, el kirchnerismo. No es lógico que las demás madres, esas que lucharon contra la basura de la dictadura militar que nos sometió en el oprobio y la degradación humana, se queden calladas. Tal vez deban surgir las "Madres de las Madres de la Plaza de Mayo", lo que serÃa una especie de movimiento que buscara legitimar las verdaderas razones del movimiento.
Las Madres de Plaza de Mayo conmemoraron 40 años de lucha con actos y espectáculos musicales. Nora Cortiñas, titular de la asociación solicitó la apertura de archivos de la dictadura; Hebe de Bonafini reivindicó al kirchnerismo. O sea, cuarenta años después la razón y la mugre se mezclaron en una olla y, visto lo visto, parece imposible separar los derechos y la verdad, de la inmundicia y la corrupción, que rebaja a ese grupo de noble mujeres, o a una parte de ellas, a delincuentes comunes que se quedaron con los "sueños compartidos" de la gente. Es lógico que Hebe reivindique a su socio de delito, el kirchnerismo. No es lógico que las demás madres, esas que lucharon contra la basura de la dictadura militar que nos sometió en el oprobio y la degradación humana, se queden calladas. Tal vez deban surgir las "Madres de las Madres de la Plaza de Mayo", lo que sería una especie de movimiento que buscara legitimar las verdaderas razones del movimiento.
Como sea, son una parte importante de este último siglo y no deben ser ignoradas. Aún cuando el delito y la defraudación moral producida a buena parte de la población todavía no haya sido cuantificado ni castigado. En todo caso deberá haber justicia, verdad y castigo para todos. Si bien no es lo mismo protestar porque el estado te secuestró, torturó y desapareció a tu hijo que robarle dinero al estado con una ONG trucha, las dos cosas son punibles por la ley y deberían esclarecerse y condenarse proporcionalmente. Y Nunca Más repetirse.