EDITORIAL | Autor: Redacción | 22-10-2019
El brote de violencia latinoamericano
El huracán venezolano
Latinoamérica eternamente violenta. Brotes de protestas se suceden en nuestro continente contra la pobreza, los tarifazos, las faltas de oportunidades que tienen a sus habitantes en un migrar que no cesa. La sombra de estos brotes de violencia acecha a la Argentina a punto de dar un cambio de timón a la polÃtica de gobierno si gana Frente de Todos. El temor a Argenzuela es una brisa que invade el clima electoral.
Las democracias en busca de modelos de progreso y caminos que acorten la brecha con el primer mundo abrieron su camino de la mano del FMI con endeudamiento y poniendo en jaque a la clase media.
Mientras las imágenes de violencia sacuden a la audiencia en todos sus formatos, aquí, en el punto del fin del mundo, nos encaminamos hacia las elecciones generales profundizando la grieta.
Enfrentados con los mismos fracasos, desigualdades, aumento de pobreza, desnutrición, descenso de la calidad educativa, desocupación, nos debatimos entre modelos que no supieron no pudieron o no quisieron cumplir con las promesas. Y si quedaba alguna duda de que al pueblo se lo escucha, se alzaron no solo las voces en Latinoamérica.
Para profundizar la duda Maduro salió al ruedo y arremetióÑ
“El foro de São Paulo, podemos decir desde Venezuela que estamos cumpliendo el plan. El plan va como lo hicimos, va perfecto. Ustedes me entienden. El plan va en pleno desarrollo, victorioso. Todas las metas que nos hemos propuestos (...) las estamos cumpliendo una por una”, manifestó el gobernante, cuyo régimen es el principal promotor de la alianza de movimientos de izquierda.
“Vamos mucho mejor de lo que pensábamos, y todavía lo que falta. No puedo decir más”, agregó.
El régimen de Nicolás Maduro celebró el domingo la violencia que aflige a Chile y Ecuador, calificándolo como un éxito de los movimientos izquierdistas agrupados en el denominado Foro de São Paulo, y resaltó que los disturbios que han dejado una docena de muertos y cientos de heridos son solo el comienzo de lo que está por venir.
Las declaraciones incrementaron las sospechas de que la agitación social que estremece a los dos países latinoamericanos está siendo promovida por Cuba y Venezuela, en acciones coordinadas a través de la controversial alianza de movimientos socialistas.
Para mitigar los dichos, Maduro señaló que los verdaderos responsables de la agitación social son los gobiernos que aplican las políticas neoliberales del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Y tomando la metáfora del chavista Diosdado CabelloÑ
“Nosotros recientemente (...) hablamos de una brisa bolivariana. Parece que esa brisa bolivariana irritó a un gentío. Pero si apenas eso es una brisa, no nos hemos convertido en una ventolera. Y ay, si nos llegamos a convertir en un huracán que sea capaz de llegar a todos lados”.
“Apenas estamos en etapa de brisa, y no la detiene ni (el Secretario General de la OEA, Luis) Almagro, ni el Grupo de Grima (Grupo de Lima), ni la OEA. Eso no lo detiene nadie”, agregó.
¿Qué es el Foro de São Paulo?
El Foro de São Paulo se constituyó en 1990, cuando partidos de izquierda de Latinoamérica y del Caribe se reunieron a invitación del Partido de los Trabajadores (PT Brasil), con el objetivo de discutir la nueva coyuntura internacional después de la caída del Muro de Berlín y las consecuencias de la implantación de políticas neoliberales por la mayoría de los gobiernos de la región.
El encuentro de estos partidos se realizó en la ciudad de São Paulo, en julio de 1990, y logró reunir 48 partidos y organizaciones que representaban distintas experiencias y matrices político-ideológicas de todo el continente latinoamericano y del Caribe.
Por esta razón, en el encuentro siguiente, en la Ciudad de México (1991), se consagró el nombre “Foro de São Paulo”.
En el II Encuentro surgió también la idea de trabajar por una integración continental a través del intercambio de experiencias, discusión de las diferencias y búsqueda del consenso en las acciones de las izquierdas en el continente.
Es un movimiento continental que desembocó en las victorias electorales de una serie de presidentes socialistas, incluyendo el del fallecido presidente Hugo Chávez, que llegaron a dominar por algunos años gran parte de la región.
Impulsado desde por la dictadura castrista, el movimiento luego recibió el enérgico financiamiento de la Revolución Bolivariana bajo Chávez y luego Maduro.
Los críticos del movimiento acusan a la organización de promover proyectos dictatoriales de corte castrista a través de métodos electorales, como ocurrió en Venezuela.
Las declaraciones del régimen fueron emitidas en momentos en que Chile se encuentra bajo una declaración de Estado de Emergencia decretado por el presidente Sebastián Piñera, quien advirtió que su país “está en guerra contra un enemigo poderoso” que promueve los disturbios.
Al menos ocho personas han muerto en Chile aunque cifras extraoficiales ya han elevado el saldo a 11 decesos. Según el Instituto Nacional de Derechos Humanos, otras 44 personas han resultado heridas, nueve de ellas graves, y 283 habrían sido detenidas.
En Ecuador, miles de manifestantes sacudieron la capital con actos vandálicos a inicios de mes en protesta con la decisión de subir los precios de los combustibles, dejando un saldo de un muerto y más de 450 detenidos.
Durante las protestas en Quito, el presidente Lenín Moreno acusó al expresidente Rafael Correa y a Maduro de orquestar las manifestaciones para perpetrar un “golpe de Estado” contra su gobierno
“Diecisiete detenidos en el aeropuerto de Quito esta mañana. La mayoría de ellos venezolanos. En su poder, información sobre la movilización del presidente y vicepresidente”, declaró el 10 de octubre la ministra de Interior de Ecuador, María Paula Romo, en su cuenta de Twitter.
La denuncia fue posteriormente recogida por el canciller colombiano Carlos Holmes Trujillo, quien anunció que su país denunciará al régimen de Maduro ante los organismos multilaterales.
“Los intentos desestabilizadores en varios países, promovidos por el dictador Maduro, serán denunciados ante Consejo Permanente de la OEA y el TIAR”, anunció Holmes en Twitter.
Muchos observadores coinciden en que la agitación social registrada este mes en Chile y Ecuador parecen estar siendo coordinados desde afuera.
“Lo que está pasando es lo que yo llamo una contraofensiva del Castro-Chavismo en las Américas. Están en un estado terminal las dictaduras de Venezuela y Cuba y para sostenerse y salvarse han decidido incendiar a la región”, dijo desde Miami el abogado y ex ministro de la Presidencia de Bolivia, Carlos Sánchez Berzaín.
Bolivia se suma a la violencia de la región al anunciarse como ganador de las elecciones a Evo Morales.
La sombra de estos brotes de violencia acecha a la Argentina a punto de dar un cambio de timón a la política de gobierno si gana Frente de Todos. El temor a Argenzuela es una brisa que invade el clima electoral.