EDITORIAL | Autor: Lic. José Luis Dranuta | 15-07-2019
Second chance
Y esto sà que es Argentina
Estamos dirimiendo quiénes nos van a gobernar en el perÃodo 2019 - 2023, y resulta que los dos candidatos con alguna oportunidad de ser gobernantes ya han demostrado cabalmente su incapacidad para desarrollar económicamente a nuestro paÃs en términos de trabajo, salud, seguridad, educación, por nombrar algunos de los ejes. Esta suerte de second chance nos muestra desesperanzados, si tenemos en cuenta que el rechazo a ambos contrincantes de fuste (Macri y Cristina) es grande, grave e irreversible.
Según el gurú de las encuestas de Macri, Jaime Durán Barba, el rechazo al actual presidente del otro lado de la grieta es del 25 %. Es decir, el voto negativo, o sea, el de las personas que bajo ningún concepto votarían al "presidente Mauri" es de 1 cada 4 votantes. Grave, pero no tanto si lo miramos del otro lado de la grieta: las personas que jamás votarían a Cristina (aunque no encabece la fórmula, que de hecho tiene a Alberto Fernández como presidente) es del 45%. La contienda parece que va dirimirse según a cual de los canditados se odie menos. Con 35 % de pobres y 7 % de indigentes, Argentina parece encaminarse a un 2020 de crisis, gane quien gane, de estos dos patéticos rivales.
Saltemos la grieta, dicen desde el tercer sector en pugna. Las encuestas le dan menos del 5 % de posibilidades. En otros términos, más de 9 de cada 10 argentinos estamos cautivos de uno u otro lado del conflicto y ya tomamos parte. Casi 4 de cada 10 de esos argentinos que ya tomaron parte también, o bien son pobres o indigentes.
Mientras los medios dominantes aventan fantasmas a uno y otro lado de la grieta, pensamos en que la sabiduría popular suele no equivocarse, más si pensamos, por caso, en Bartolomé Mitre, que hace más de 100 años dijo aquella famosa frase: "Cuando todo el mundo se equivoca, todo el mundo tiene razón". Entonces, a uno y otro lado de la grieta la gente votará por sus razones y sus odios, no por lo que le inculquen desde los laboratorios de marketing de los partidos. En aquella última pulsión, cuando el elector se encuentre a 10 pulgadas de la boleta que va a elegir podemos cifrar nuestra última y genuina esperanza. "Segundas partes nunca son buenas" dicen desde el refranero de lo popular, tal vez porque cuando se acuñó la frase no se había aún rodado "El Padrino II". La segunda parte de Mauricio, sin dudas, será igual o peor que la primera, jamás mejor. La vuelta de la actual oposición al poder (sería la primera de Alberto y la tercera de Cristina) no podrá mejorar en nada a los períodos del matrimonio K 2003 - 2015.
The second chance será para nosostros final time. Y en el hecho de la sentencia estriba el presagio.