EDITORIAL | Autor: redacción | 17-04-2019
La realidad
El 4,7 que no fue
"La realidad es como la veterana que te dejó por un chico más jóven", dicen en el bar. "Es la que te juró amor eterno pero ahora mete un tipo en su cama que no sos vos, y encima te llama por teléfono para decirte que tiene razón", completa el filósofo gastronómico, café de por medio. El gobierno sabe que la realidad es dura, pero la muestra como si la chica fuese a volver, o como si te hubiese querido en serio, alguna vez. La inflación de marzo fue de 4,7% y acumula 54,7% en un año, lo que la constituye en la más alta desde 1991. El fracaso de este gobierno, a todas luces, lo coloca en la posición más incómoda posible a un presidente débil timorato, irresoluto y salpicado por la histórica corruptela familiar que vivió y cimentó su poder a expensas del estado: un modelo derechoso decadente, frente a un progresismo de izquierda amorfo, corrupto y sin ideas, parecen ser las opciones de los votantes de nuestro paÃs en su versión 2019. Si al menos el fuego de Notre Dame se hubiera propagado hasta la Rosada, quien sabe, se hubiese purificado algo de lo que parece ser la peor de las pesadillas.
Con uno de cada tres argentinos en la pobreza, las empresas PyME destruidas, el comercio en retracción, recordar el "bailecito" de Macri en el balcón de la Casa de Gobierno, el día de su asunción reconforta; al menos en aquella época pensábamos que algo podía mejorar.
El número de inflación que informó el INDEC es mucho más bajo al que estimaron las consultoras y los gremios. En el acumulado anual, el aumento del 54,7% el más alto en los últimos 28 años. La inflación de marzo fue del 4,7% y acumula en el primer trimestre del año un 11,8%, informó este martes por la tarde el INDEC. En los últimos 12 meses, los precios acumularon un alza del 54,7%, indicó el organismo.
Es decir, este INDEC que dice la verdad, pero que se maquilla, parece ser el MODO AHORRO que el gobierno tiene para comunicar los hechos desagradables. Un país de rodillas, esperando el tsunami desde adentro o desde afuera, irreconciliable, es el producto de 16 años de gobiernos desafortunados. Los doce de los K y los 4 de M realmente nos ponen contra la pared con el escaso margen de ilusión, casi mágica, con la que un enfermo terminal aguarda su resurrección.
"La realidad es como la veterana que te dejó por un chico más jóven", dicen en el bar. "Es la que te juró amor eterno pero ahora mete un tipo en su cama que no sos vos, y encima te llama por teléfono para decirte que tiene razón", completa el filósofo gastronómico, café de por medio. El gobierno sabe que la realidad es dura, pero la muestra como si la chica fuese a volver, o como si te hubiese querido en serio, alguna vez.
