EDITORIAL | Autor: Lic. José Luis Dranuta | 29-06-2018
Nene cheto en un potrero
Cosas que pasan
Una propaganda de una tarjeta de crédito que repiten hasta el hartazgo por estos dÃas del mundial muestra a un chico, bastante chetito en modo "nene de Nordelta" arengando en la previa a los jugadores de la selección diciendo "dejemos todo, como en el potrero..." El absurdo del potrero que el niño cheto jamás conoció es la semblanza de un paÃs que tiene un presidente cheto que piensa que es "curtido" tocar timbre en un barrio de clase media. El absurdo mayor es, tal vez, el libretista que pergeñó el imaginario niño hablando como si supiera, y a un público tan tarado como para creerle. Tal vez Durán Barba y el publicista de ese comercial trabajen para la misma agencia.
Técnicamente el aviso es un comercial de la agencia BBDO Argentina para (Tarjeta) Naranja, Copa del Mundo de Futbol 2018. Continuando con la campaña "Un gol, un potrero" un niño se escabulle y entra en el vestuario de la Seleccion Argentina para arengar a los jugadores (Biglia, Mercado, Lanzini...)
"No se olviden que este es un juego que aprendimos a tomarnos en serio desde chiquitos. Dejemos todo, menos de jugar"
Datos del spot
Corto del anunciante:https://youtu.be/9UUGlTJW9pE
Anunciante: Naranja
Producto: Un gol, un potrero
Agencia: BBDO Argentina
Productora: Landia
Dirección: Lucas Shannon
Asistencia de dirección: Diego García
Director de Arte: Sebastián Beretta
Corrección de Color: Jorge Russo – Pentimento Color Grading
Dirección de fotografía: Marcos Hastrup
Edición: Alejo Santos
Banda musical: TDL
Pero la realidad de la vida nos mueve por caminos un tanto más prosaicos, y el niño no deja de ser un chetito pibe de los barrios del Norte simulando ser lo que no es. Nosotros, a su vez, simulamos ser hinchas de un país y pensamos que tenemos el mejor jugador del mundo; casi como por un designio divino, nuestro destino de gloria estaría asegurado y seríamos tan campeones del mundo como las inversiones internacionales que iban a llover en el país a partir de que Macri fuera presidente. El dólar de este fin de semana, rozando los 30 pesos le pone fin a una de las ilusiones. Esperemos que el sábado, Messi y nuestra selección, no le pongan fin a la otra. Y que sigamos soportando al insoportable pibe de la tarjeta de crédito unos días más. Amén.
