El mecanismo

Lavajato y Odebretch, versión Argentina

La ficción generó esta serie, acerca de una extensa investigación de corrupción real que se ha entrometido en la problemática política de Brasil. Esto logró indignar a los simpatizantes del expresidente de izquierda Luiz Inácio Lula da Silva y al detonar el debate acerca de qué tanto un docudrama debe atenerse a los hechos. De hecho, ha causado controversia desde que se estrenó el 23 de marzo. Los críticos dicen que sus imprecisiones son injustas para Lula. Otros creen que el programa es una muestra deprimente, más o menos justa, de una investigación compleja que ha resultado en más de 100 personas declaradas culpables, entre ellas personajes políticos de alto rango como el expresidente.

Por caso, Paulo Roberto Pires, un columnista con tendencias de izquierda de la revista Época, dijo que la serie es ingenua y engañosa. Agregó que es reduccionista y presenta complejos temas políticos, históricos y sociales como si solo fueran parte de la lucha contra la corrupción.  Pero desde la otra vereda de la grieta dicen  que "Lula y Dilma nos están ayudando mucho a promocionar la serie".

Ahora viene la trama Argentina. Benito Roggio procesado, Etchegaray involucrado en contrabando agravado. Lula preso y Cristina en camino de. La próxima serie sin duda nos va a toca mucho más de cerca y la polvareda se va a levantar por estas latitudes.

Así las cosas, algunos periodistas, legisladores y personas se han jugado su propio pellejo y prestigio durante el gobierno anterior denunciando irregularidades que ahora toman cuerpo. A su vez, algunos lo están haciendo con este gobierno actualmente y, de seguro, vamos a ver a personajes de esta etapa procesados en un par de años, cuando mucho. El mecanismo no se detiene, el tema es que, al igual que en el baile de la escoba ( o de la silla) cuando la música se detiene alguno queda jodido, pero en serio.