Es habitual que por cada hijo se formen grupos de clase, de extraescolares, cumpleaños, o festivales de fin de curso con el objeto de disponer de un canal de comunicación ágil que ayude a mantenerse informados sobre novedades e imprevistos. El chat sustituye a los corrillos de la puerta del colegio, y puede ser un medio muy eficaz para distribuir información importante en cuestión de segundos.
Evitar que aparezcan 100 o 200 mensajes con confirmación, OK o emoticones.
Los expertos piden que el grupo de WhatsApp no se convierta en un sustituto de la falta de responsabilidad de os hijos. Especialmente en el pedido de tareas, confirmación de fechas de exámenes. Algunos autores advierten sobre el cambio de roles, por ejemplo, en madre secretaria, en asistente personal, o simplemente en agenda viviente.
Álava Reyes, para quien «la responsabilidad de lo que pasa en el colegio es del niño, que es quien debe saber cuáles son sus deberes, qué día son las excursiones, o cuándo tiene que llevar la flauta o ls galletitas». Esta cuestión es, a juicio de Álava, «más grave de lo que parece»: «Al final, con estos grupos de WhatsApp estamos haciendo niños especialmente cómodos, e impidiendo que aprendan a asumir las responsabilidades que les corresponden según su edad».
Ni que hablar en sustituir los canales tradicionales de comunicación y poner en común quejas, acusaciones o juicios de valor sobre personal del colegio, produciéndose en ocasiones verdaderos linchamientos virtuales.
Ojo si abandonás el grupo, podrías convertirte en el nuevo tema del grupo y sobredimensionar la salida a partir del cartelito "fulanito ha abandonado el grupo".
El grupo de whatsapp es una nueva forma de comunicación, se interactúa a través de las nuevas herramientas tecnológicas, facilita la información y la integración. El sentido común debería ser el punto de partida para una relación sana y constructiva.