| Autor: Lic. Mirtha Cáffaro | 20-09-2015
En Cuba
Cuba y argentina tienen una historia entrañable que se centró en la figura revolucionaria del Che. Hoy, otro argentino llega a Cuba para dar un giro a largos años de historia silenciada de la iglesia católica bajo el régimen comunista.
Cuba recibe al primer Papa latinoamericano tras protagonizar el acercamiento entre Cuba y Estados Unidos. Francisco es la figura que aglutina las intenciones de la nueva Cuba de raúl Castro.
Estos años de apertura al mundo, modernización e intento de progreso tienen un sin fin de carencias que sume al pueblo cubano en un largo camino por delante.
Las iglesias que otrora eran lugar de presencia del culto, se convirtieron tras la revolución, en ruinas silenciosas y sombrías que nadie, prácticamente habitan.
Algunas, solo ruinas, otras, bibliotecas en potencia, muchas, museos de la revolución. El culto religioso se redujo a unas pocas como la Iglesia de Trinidad, una entre muchas que solo asoman las cúpulas vistas desde lo alto como testigos de lo que fue un pueblo religioso.
Esta visita del Papa es diferente a las anteriores. Hay un pueblo entusiasta que se anima a gritar "Cristo vive" o "Esta es la juventud de Cristo".
Seguramente, los resultados políticos se harán visibles en un plazo más cercano que los cambios en la integración a la iglesia. Pero, sin duda, es un comienzo.
Ahora Cuba, tendrá dos hombres argentinos que marcan un camino sin retorno. El Che, el camino de la revolución y el Papa Francisco, el fin del embargo económico.
Tras la visita a Cuba, tanto el Papa como el presidente, Raúl Castro, asistirán a la reunión de la ONU. en Nueva York y marcarán el camino de la nueva Cuba.