EDITORIAL | Autor: redacción | 20-11-2018
Trabajo y Producción
Llaves para el crecimiento
Dante Sica es el ministro de Producción desde junio de este año, cuando la turbulencia polÃtica se llevó puesta a buena parte del gabinete de Macri. Es licenciado en economÃa y contador público de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP). Se especializa en el análisis de los sectores industriales. Se desempeñó como secretario de Industria, Comercio y MinerÃa durante la presidencia de Eduardo Duhalde en 2002. Su visión sobre el desarrollo y el futuro no es la que tiene buena parte del gabinete nacional, sin duda más adepto a los mercados, la colocación del dinero y el incentivo de la bicicleta financiera. Sin ser cándido, es un hombre consciente de las limitaciones de la producción nacional frente al escenario global, pero junto con su figura, sopla un aire del rumbo del que nunca nos debimos correr. Luego la del crisis del 2001 y ante la debacle inevitable, el paÃs salió adelante con medidas dolorosas que incentivaron el trabajo. Tanto la criticada "pesificación asimétrica" como la salida real de la convertibilidad, le permitieron a los privados producir, generar riquezas y demandar empleo. En estos dÃas, en que el gobierno va a colocar otros 120.000.000.000 (ciento veinte mil millones) de pesos en la calle hasta fin de año y que ello pone en marcha otra vuelta especulativa, serÃa bueno asirse a los principios y corregir los vicios que nos vienen arrasando. Caso contrario tendremos un dólar cercano a los 45 pesos en diciembre y más de aquellas corridas que nadie quiere, o al menos, nadie de los que vivimos de nuestro trabajo.
Sica fundó y dirige la consultora económica Abeceb que asesora a empresas e instituciones nacionales e internacionales en temas de gestión empresaria, análisis económico y políticas públicas. Sica fundó y dirige la consultora económica Abeceb que asesora a empresas e instituciones nacionales e internacionales en temas de gestión empresaria, análisis económico y políticas públicas.
Este hombre ha escalado en las preferencias del público y periodismo en general, por encima de la figura del silenciado Marcos Peña y de Frigerio, fundamentalmente porque tienen menos desgaste y porque no son los mismo. Estos días en que se tomarán decisiones monetarias tan sensibles, es bueno para este gobierno mostrar caras más amigables, dado que las otras, ya en el tramo final del mandato, tal vez el primero de los dos posibles, están muy desgastadas.
Trabajo y producción son la contracara de lo que ofrece este gobierno, en términos reales. Para ser sinceros, el aumento de la precarización laboral es un hecho desde el segundo gobierno de Cristina, y este no ha logrado revertirla. El nuevo escenario mundial, en el que se incorpora la robótica como regulador del mercado laboral, generará nuevos choques entre oferta y demanda para los que el país no solo aún no está preparado sino que carece de estrategia para abordarlos.
Tal vez, y como queda reflejado en los informes de las consultoras más prestigiosas, entre las que está Abeceb del ministro Sica, la escencia de la recuperación venga del único lado que puede venir: del trabajo y la producción, con la consecuente eliminación de la bicicleta financiera, la que quedaría obsoleta por las mismas razones por las que hoy es el único vehículo viable, aunque en distinto sentido.